Como siempre decimos en Presas Ocampo, cada etapa por la que pasan los viñedos es fundamental para la calidad del vino. Por lo tanto, no solo debemos preocuparnos en el proceso de vendimia y fermentación del mosto, también hay que mimar la vid cuando está en reposo, o cuando despierta después del largo invierno.
El otoño es una estación de tránsito entre que se realiza la vendimia y se abren las bodegas. Y aunque parezca que es entonces cuando el trabajo está en las barricas, lo cierto es que es inevitable que nuestras miradas se desvíen hacía los viñedos, pues es en esta estación cuando adoptan un color rojizo con gran belleza. Incluso Van Gogh se quedó prendado de esa belleza y lo retrató en su cuadro “El Viñedo Rojo” una de sus obras más características.
Durante el otoño, la viña se prepara para la llegada del frío, lo que provoca que caigan sus hojas y que se entre en la fase de reposo. En muchas regiones el otoño es testigo de la maduración de la uva, de la vendimia y del proceso de preparación para las bajas temperaturas, así que de alguna manera podemos decir que esta estación es una de las más importantes para el ciclo de la vid.
Nosotros te proponemos que entre que las hojas van adoptando ese color rojizo, el vino sigue formándose dentro de nuestras barricas y las temperaturas bajen paulatinamente, disfrutes de la belleza del momento acompañado de una buena botella de vino. Y es que el otoño también se presta a eso, a compartir momentos especiales con tus seres queridos junto con el mejor de los caldos. Y en Presas Ocampo nos encanta de ser partícipes de todos los tuyos. ¡Feliz otoño!
