La enología es un sector complejo que tiene la capacidad de llegar a miles de personas. Pues al final, todos los consumidores del vino participamos de ese mundo de alguna manera aunque no entendamos los tecnicismos de la profesión. No obstante, hay algunos amantes del vino que han sentido la curiosidad de saber más acerca de su proceso de elaboración y es entonces cuando deben enfrentarse a una terminología no muy accesible.
Como bien sabéis, en Presas Ocampo estamos haciendo entregas en las que hablamos sobre terminología específica de la enología que nos ayuda a entender más el proceso del vino, así como diferenciar sus tipos, etc.
Hemos hablado de la acidez o de términos genéricos en anteriores ocasiones. Hoy vamos a dedicar este espacio a hablar sobre los diferentes tipos de barricas que podemos encontrar y en qué afectan a la elaboración de nuestro caldo favorito.
Barrica bordelesa: Es la barrica que tiene una capacidad de 220 litros aproximadamente y que se utiliza para la crianza del vino.
Barrica de roble americano: Como su propio nombre indica, es una barrica fabricada con roble americano, que es una madera densa y muy aromática (suele ofrecer tonos de coco y vainilla).
Barrica de roble europeo: Esta barrica hecha con roble de origen europeo se caracteriza porque la madera es más porosa y muy tánico, aunque mucho menos aromática.
Barrica de rofle francés: Es poco tánico y fabricada con madera un poco menos densa que el roble americano pero más densa que el roble europeo.
Como bien sabéis, el proceso de maduración en barrica es fundamental para conseguir el resultado esperado en cada vino. Por ello es fundamental conocer sus diferentes. Si quieres permanecer al tanto de estas y otras muchas noticias relacionadas con el vino, en Presas Ocampo entrarás toda la información que necesitas.